Cuando se reiniciaron las Pruebas Nacionales al final de los ochenta, la idea era impactar en la calidad de la educación dominicana que para esa época sus resultados eran más que precarios. Se pensaba que esas Pruebas podían tener un efecto catalizador tanto en la motivación de los estudiantes como en el mejoramiento de la docencia a nivel del aula. En verdad, las expectativas puestas en esa medición han resultado frustradas. Hoy día el sistema educativo evidencia los mismos bajos resultados que antes, con la agravante de que en la sociedad se han producido cambios importantes en la circulación de conocimientos y, por lo tanto, en la necesidad de tener ciudadamnos mejor formados.
El fracaso de las Pruebas Nacionales tiene que ver principalmente con la baja inversión que realiza el Estado en materia de educación. Nuestras escuelas carecen de todo lo necesario para que el proceso educativo sea más eficiente y orientado por los principios de la reforma curricular de los noventa. De otro lado, las Pruebas carecen de validez. Si su finalidad es mejorar la calidad, su énfasis debería ser el proceso educativo en su conjunto, es decir, poner su atención en los diferentes momentos del proceso formativo, desde que el alumno ingresa al primero de básica hasta que obtiene el grado de bachiller, y no al final de cada nivel educativo como en la actualidad.
El proceso educativo debe ser objeto de verificación de su calidad con los mismos métodos que se emplean en la empresa moderna, en donde se valora tanto la materia prima que ingresa como el proceso y sus resultados. En nuestras escuelas sólo se valora esto último, lamentablemente cuando ya es muy tarde. Es por esto que entiendo que las autoridades de educación deben iniciar una rápida revisión de esas pruebas, a fin de que las mismas tengan una orientación diagnóstica en los momentos importantes de la trayectoria escolar de cada niño. Dichar pruebas se deben colocar al final del segundo grado de básica, del cuarto, del sexto, del octavo, del segundo de media y en el cuarto. Y en cada uno de estos momentos verificar el logro de las competencias esperadas.
La importancia estratégica de la lengua materna y la matemática dentro del contexto del currículo de la educación básica debe ser repensada como una medida para mejorar la calidad de los resultados que obtienen nuestros alumnos en la educación básica y media. La formación general de nuestros ciudadanos debe tener como fundamento el dominio pleno de las competencias previstas en el currículo en estas dos áreas. Una excelente formacián en estos campos curriculares es la mejor receta para que la escuela dominicana inicie el proceso de su recuperación y para ello no se requiere de Pruebas Nacionales orientadas a la promoción. Solo se requieren de buenos docentes y muchos recursos en el presupuesto del sector educativo.
Educación Universitaria » Las Pruebas Nacionales y la Calidad de … « Solo Gourmets Says:
julio 26th, 2009 at 10:06 amVisit Educación Universitaria » Las Pruebas Nacionales y la Calidad de … « Solo Gourmets
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Maria Antonia De la cruz Bonett Says:
septiembre 10th, 2010 at 11:19 pmVisit Maria Antonia De la cruz Bonett
En verdad, las expectativas puestas en esa medición han resultado frustradas. Hoy día el sistema educativo evidencia los mismos bajos resultados que antes, con la agravante de que en la sociedad se han producido cambios importantes en la circulación de conocimientos y, por lo tanto, en la necesidad de tener ciudadamnos mejor formados.
Yanet de la Rosa Says:
septiembre 16th, 2010 at 9:23 pmVisit Yanet de la Rosa
Estamos totalmente deacuerdo con el autor de este articulo y podriamos añadirle que las pruebas nacionales no solo han sido un fracaso educativo sino que se ha convertido en un negocio lucrativo para los directores de los centros educativos publicos ya que piden una cuota demasiado elevada,cuando el Estado provee los materiales y el personal necesario que va a trabajar.
!ojalá y quiera Dios que este proyecto sea descontinuado!
Yenny Leonardo Vargas Says:
mayo 31st, 2011 at 8:21 amVisit Yenny Leonardo Vargas
Estoy de acuerdo que las Pruebas Nacionales se crearon para mejorar la condicion de la educacion y motivar a los estudiantes a esforzarce mas. y que tambien en los años pasados era un fracaso y carecian de validez.
Pero no estoy de acuerdo con la eliminacion de las mismas. Han mejorado significativamente en cuanto a los resultados. Se han establecido controles extremos para que no exista boicoteo por parte de personas que quieran dañar el concepto que se ha creado de lo que realmente son las Pruebas Nacionales.
El año pasado y este, se hicieron pruebas diagnosticas en 4to. del Nivel Basico y 2do. del Nivel Medio, para medir el aprendizaje, y si realmente los contenidos se estan aplicando como lo estable el curriculo.
Actualmente, el maestro se ha comprometido a cumplicr con la aplicacion de todos los contenidos, dando lugar a que el estudiante este preparado que el proceso de las Pruebas Nacionales.
Se que la educacion dominicana necesita recursos para mejorar la calidad de la misma, no obstante, a persar de esto, el maestro se siente comprometido, preocupado y esta dando todo para que la educacion siga mejorando.
Eddys Liria Ozuna Says:
julio 5th, 2013 at 10:00 amVisit Eddys Liria Ozuna
En la misma línea del autor creo que esta estrategia de implementación de las Pruebas Nacionales ha sido un fracaso total y un vil negocio fructífero para lo que están más arriba en el Sistema Nacional, y que por mi experiencia puedo afirmar que el bolsillo del director de escuela pública sufre parte de estas consecuencia, el cual solo le llega a la escuela una caja con cuadernillos, un sobre con hojas de respuesta y un jurado examinador, pero se olvidan de que el director tiene que recoger y devolver la prueba diariamente en el Distrito Educativo , lo que genera gastos de combustibles o de pasajes; ofrecer algo de merienda al jurado examinador; y alguna contribución económica para que estos últimos hagan el trabajo con agrado, y todo esto sale del bolsillo del director, porque se le prohíbe gestionar algún fondo para tales fines; además de que a veces somos maltratados por los Técnicos Distritales que se no asignan, quienes dicen dichos por no supervisas las Pruebas Nacionales en escuelas de los campo. A esto también se le agrega que no se puede tomar un centavo del presupuesto de descentralización para acarrear dicha prueba.
Por otro lado el maestro dominicano no ha tomado conciencia de que es el alumno/a que se examina y toman un cuadernillo desde que llega la prueba para querer decirle las respuesta a los alumno/as; y con todo esto en los estudios nacionales e internacionales quedamos en un nivel muy bajo, ¿y entonces? ¿Qué está pasando?, ¿los maestros están reprobando en una prueba con contenidos que ellos mismo desarrollan en las aulas?.